lunes, 7 de mayo de 2012

La comunidad vs la administración: el ciudadano participativo

Mirando la charla de Jennifer Pahlka en el TEDex (Visionar Video) caí en la cuenta de la gran diferencia de concepto de ciudadanía entre la sociedad americana y la europea, más en concreto la española.

Lo que Jennifer Pahlka cuenta en su proyecto Code for America, es esa mentalidad tan americana de vecindad, de comunidad, de ciudadano participativo. En USA las comunidades son las que sacan las castañas del fuego, los vecinos de un municipio conocen al dedillo los gastos que les genera esa vecindad, las partidas presupuestarias, y deciden en que quieren gastarse el dinero y con quién, eso del dinero público se reduce a la mínima expresión, porque el dinero no es público, es del dueño de los cheques que pagan ese gasto. Así que aunque solo sea por un interés económico, la colaboración entre los miembros de la vecindad, y el sacar el máximo partido a la capacidad de cada uno, se lleva a la máxima expresión.

En Code for America, los ciudadanos evitan a toda costa el pagar para aumentar la burocracia, prefieren participar en las soluciones, adoptar problemas, con medidas sencillas y que además les hace ser mejor personas, ya que implica una especie de solidaridad directa.

Estas son las sensaciones que me dio cuando visioné la charla de la señora Pahlka, me dio envidia sana, y me vinieron a la cabeza millones de formas en las que en nuestra ciudad podríamos poner en marcha proyectos de este estilo. Se que muchos pensaréis que en España esto es imposible, que somos muy individualistas, etc. Pero yo os cuento, que movimientos como el de los huertos urbanos en solares céntricos de la ciudad, o la lucha de los padres del barrio de Ruzafa por conseguir un colegio en la calle Puerto Rico, son pequeños signos de que la sociedad valenciana no está aletargada del todo como creemos, que hay barrios en los que el sentimiento de comunidad existe, aunque no se traduzca en medidas fructiferas o no se vea con buenos ojos por miedo desde los políticos de turno.

Desde nuestra burócrata administración municipal siempre se han tenido como amenazas los movimientos ciudadanos, no se han seguido de cerca, y no se han explorado las posibilidades que ofrecen un puñado de vecinos implicados e interconectados con la situación que les rodean. Hierran estos dirigentes, lejos de ser una amenaza, la comunidad, es una oportunidad, solo hay que confiar en nuestros conciudadanos, en el concepto muy español de barrio, nuestras "comunidades", en fin, confiar más en el individuo. Estoy firmemente convencida que inculcar los valores de comunidad y responsabilidad ciudadana nos ahorraría mucha burocracia y mucho dinero, que se traduciría en menos impuestos, más control, y más dinero para el consumo y ahorro de cada uno de nosotros, y con la actual crisis se hace más necesario que nunca que los ciudadanos tomemos el control de la administración, y deje de suceder lo que hasta ahora, que es la administración, los burócratas, los que han tomado control de nuestro dinero, de nuestras vidas.

Como dice con mucha razón Pahlka: "Somos ciudadanos, y no vamos a arreglar el gobierno, hasta que no arreglemos la ciudadanía"

Creer en ello, como en todo, es hacerlo posible.


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